Tener problemas con algún vecino de tu comunidad es algo que puede ocurrir por diferentes motivos, pero cuando más allá de un episodio aislado el tema se transforma en un inconveniente constante que afecta la convivencia, se comienza a sufrir acoso vecinal.
El blocking o acoso vecinal
Así, el blocking es el acoso vecinal y se trata de un delito sancionado con pena que va de los dos a los tres años de prisión, pero además el vecino acosador también tendrá una pena económica estimada en 6 euros al día por un período de tiempo que va de seis meses a dos años.
El acoso vecinal o blocking se da cuando una persona comienza a recibir amenazas por parte de un vecino. Estas amenazas pueden ser desde notas inquietantes hasta pintadas en la puerta de su casa con insultos. En muchos casos las propias víctimas de blocking no son conscientes de que están siendo objeto de un delito y en ocasiones necesitan de la ayuda de un psicólogo para poder enfrentar diferentes problemas como depresión, ansiedad, aparición de fobias y hasta desajustes en el sueño.
Existen casos de víctimas de blocking que han llegado a tener un miedo paralizante que les impide salir de sus casas. Incluso, en otros casos, el temor hace que tampoco se sientan seguras en su propio hogar por miedo a represalias de su acosador.
El vecino acosador, ¿cómo identificarlo?
El perfil del acosador puede definirse como el del típico psicópata socializado que no tiene el más mínimo respeto por otras personas, pero que también es un simulador que sabe esconder muy bien sus verdaderos sentimientos de odio con una personalidad muy narcisista.
En España no existe la cultura de realizar denuncias por acoso vecinal, muchas veces esto se debe a la falta de conocimiento de la puesta en vigor de las herramientas que fueron establecidas con la reforma del Código Penal en 2015.
Generalmente el comienzo del conflicto, que lleva a un vecino a sufrir blocking, es una discusión o problema de convivencia que puede ser insignificante como los ruidos molestos, pero si el conflicto continúa y las amenazas son constantes la recomendación es hacer una denuncia para que pueda llevarse adelante el procedimiento judicial.