Cuando se habla de accesibilidad se hace referencia a la posibilidad de cualquier persona de tener acceso, paso o entrada a un lugar o actividad sin que medie ningún tipo de limitación ya sea por deficiencia, discapacidad o minusvalía.
La accesibilidad arquitectónica es aquella que hace referencia a edificios tanto públicos como privados, existiendo en España una regulación jurídica sobre el tema, atendiendo el gran porcentaje de personas que poseen necesidades, y dentro de esas necesidades se encuentran los ascensores públicos para minusválidos.
Gracias a la tecnología existen hoy ascensores públicos especialmente creados y diseñados para atender las necesidades de personas minusválidas. Se trata de cabinas que cuentan con las medidas adecuadas y suficientes para que en su interior pueda entrar y salir con total comodidad una silla de ruedas y uno o más acompañantes. Además, en la normativa EN 81-70 además de las características dimensionales, se contemplan las características que facilitan el uso a personas con limitaciones tanto motrices, visuales y/o auditivas.
Especificaciones ascensores públicos adaptados
En los ascensores adaptados para personas minusválidas las puertas tienen un ancho mínimo de 80 centímetros y cuenta con un dispositivo de seguridad, botonera a menos de 120 centímetros de altura y numeración en relieve o Braille para personas ciegas, además de una señalización luminosa que indica el tránsito por cada planta y otra señal acústica que anuncia la llegada a cada una de ellas.
En todos los ascensores públicos adaptados a minusválidos las puertas permanecen abiertas durante 8 segundos y el tiempo de cierre es de 4 segundos.
Como medida de seguridad, dentro de la cabina del ascensor existe una alarma y también un interfono instalado a una altura de entre 1,10 y 1,30 m y una luz de emergencia.
Los problemas de accesibilidad no solo afectan a personas que deben usar silla de ruedas sino que también perjudican a un porcentaje de la población que tiene dificultades para ver, oír o comunicarse de ahí la importancia de un acceso sencillo que siempre será sinónimo de comodidad.
Las empresas que se dedican a la fabricación de ascensores tienen como objetivo eliminar las barreras arquitectónicas que impiden un acceso fácil y confortable para personas minusválidas; por ello existen hoy distintas opciones como son los elevadores verticales de grandes alturas y que pueden utilizarlos todo tipo de personas y pueden instalarse en todo tipo de inmuebles incluyendo los edificios públicos o viviendas unifamiliares.